Los usuarios de cannabis estamos en jaque. Y además del siempre adverso
patrullaje extorsionador que ronda las tienditas
y otros puntos de venta, ahora diversos gobiernos locales del país agregan
políticas de represión a los usuarios disfrazadas de amor al prójimo con el sui generis nombre de Tribunal de Tratamiento de Adicciones.
Y
es que diversas entidades del país han optado por aceptar esta política de
origen norteamericano que es conocida como Cortes de drogas, la cual opera con el afán de ofrecer tratamiento a “adictos” que
hayan cometido algún delito y bajo el supuesto de que cuando se combaten las
adicciones también se combaten los delitos.
¡¡Esto es peor que
la palomilla blanca!! Y no sólo por
el reforzamiento del cliché del usuario delincuente, pero ahora perdonado
porque ¡¡lo malea la droga!! Sino, además, porque algunas entidades incluyen la posesión de drogas como causa para imponer tratamientos.
En otras
palabras, aunque el consumo en sí no conlleva castigo penal, como no es posible
ejercerlo sin romper la ley al poseer la sustancia de consumo, entonces se procesa a los usuarios por posesión. “¿Pero qué
demonios es esto?”, se cuestionó el doctor cannabis al darse por enterado…
pero tras sesudos esfuerzos, y varios cogollos después, quedó abrumado ante la
imposibilidad de dar respuesta lógica…
¿Cómo es permitido el consumo de algo cuya posesión es prohibida? Habrá que preguntarle al diputado que tenga ala mano.
Así que ya lo sabe usted, amigo, amiga, vaya pensando en su tratamiento favorito, pues en tanto solo sea posible consumir cannabis poseyéndola (la borregueada no es buena opción), cualquier usuario se encuentra en riesgo de ser detenido en posesión de mariguana y procesado por este delito: más ahora también está en riesgo de ser coaccionado de asistir a tratamiento y condicionado a concluirlo a cambio de que no sea reactivado su proceso penal.
Así que ya lo sabe usted, amigo, amiga, vaya pensando en su tratamiento favorito, pues en tanto solo sea posible consumir cannabis poseyéndola (la borregueada no es buena opción), cualquier usuario se encuentra en riesgo de ser detenido en posesión de mariguana y procesado por este delito: más ahora también está en riesgo de ser coaccionado de asistir a tratamiento y condicionado a concluirlo a cambio de que no sea reactivado su proceso penal.
Y es que la ley
entra en un contrasentido cuyos únicas beneficiadas son las autoridades corruptas.
Recientemente
inició sus operaciones el TTA del estado de Morelos y se estrenó, como se
habrán imaginado ya, por un presunto delincuente por delitos contra la salud en su
modalidad de narcomenudeo, la cual incluye a la posesión, delito por el que se
suele detener a los usuarios. ¿Y quién cree que fue el “beneficiado”? Exacto,
ya lo sabía usted: Un joven presunto delincuente por posesión de mariguana!!
La nota no
aclara si el detenido está por comercio, posesión o suministro. Esto es
importante pues la mayoría de detenciones en el DF refieren posesión simple de
drogas. Más lo que si queda claro es que, de ahora en adelante, las autoridades
cuentan con instrumentos legales para coaccionar al usuario cannábico de tomar
tratamiento a cambio de evitar una pena privativa de la libertad por cometer un
delito al que la misma ley le obliga, cuando menos mientras este decidido a ejercer el derecho de elegir sobre su cuerpo.
¡¡ El Proyecto Biblioteca
Cannábica se pronuncia en contra de la CRIMINALIZACIÓN
de los usuarios de cannabis (y otras drogas) que se realice en Tribunales de
Tratamiento de Adicciones por el presunto delito de posesión de drogas !!